(La República).- El Viceministro de Transportes, Hjalmar Marangunich, participó en la reapertura de la vía férrea Cusco – Machu Picchu luego que el concesionario, Ferrocarril Transandino S.A. (FTSA), concluyera los trabajos de rehabilitación de la vía, permitiendo a los operadores ferroviarios desde el 1 de julio, el traslado de los turistas nacionales y extranjeros.
Marangunich señaló que los puntos más críticos a reparar han sido los kilómetros 77, 78 y sobretodo el 79. “En el km. 79, los trabajos realizados han consistido en la construcción de un terraplén nuevo sobre la base de un enrocado, con el sistema de suelo reforzado (terramesch)”, informó.
Indicó que la empresa concesionaria ha realizado pruebas con coches y locomotoras en el tramo entre Poroy (km. 18) y Machupicchu pueblo (km.110) con el fin que los operadores se familiaricen con el nuevo trazo y se garantice una operación segura.
El viceministro señaló que durante los primeros 3 meses de operación en la vía completa (julio, agosto y setiembre), los operadores de trenes tendrán que operar bajo ciertas restricciones de velocidad.
“Por tratarse de una nueva vía, esta debe pasar por un proceso de asentamiento, y también porque la vía ha sido corrida hacia lado cerro, lo que ha originado una serie de curvaturas que deben ser pasadas a baja velocidad, restricción que se levantará cuando la vía pueda ser reubicado en su posición original”.
Los equipos del concesionarios seguirán trabajando en la rehabilitación integral de los 120 kilómetros de vía férrea entre Cusco y Machu Picchu, hasta fines de este año.
Como se recuerda, a fines de enero pasado los desbordes del río Vilcanota, ocasionados por tres días de lluvia intensa e ininterrumpida, causaron daños o destrucción en más de 100 puntos de la vía férrea, entre Cusco (km.0) – Machu Picchu pueblo (km.110) e Hidroeléctrica (km.122).
Fuente de información: La República
Marangunich señaló que los puntos más críticos a reparar han sido los kilómetros 77, 78 y sobretodo el 79. “En el km. 79, los trabajos realizados han consistido en la construcción de un terraplén nuevo sobre la base de un enrocado, con el sistema de suelo reforzado (terramesch)”, informó.
Indicó que la empresa concesionaria ha realizado pruebas con coches y locomotoras en el tramo entre Poroy (km. 18) y Machupicchu pueblo (km.110) con el fin que los operadores se familiaricen con el nuevo trazo y se garantice una operación segura.
El viceministro señaló que durante los primeros 3 meses de operación en la vía completa (julio, agosto y setiembre), los operadores de trenes tendrán que operar bajo ciertas restricciones de velocidad.
“Por tratarse de una nueva vía, esta debe pasar por un proceso de asentamiento, y también porque la vía ha sido corrida hacia lado cerro, lo que ha originado una serie de curvaturas que deben ser pasadas a baja velocidad, restricción que se levantará cuando la vía pueda ser reubicado en su posición original”.
Los equipos del concesionarios seguirán trabajando en la rehabilitación integral de los 120 kilómetros de vía férrea entre Cusco y Machu Picchu, hasta fines de este año.
Como se recuerda, a fines de enero pasado los desbordes del río Vilcanota, ocasionados por tres días de lluvia intensa e ininterrumpida, causaron daños o destrucción en más de 100 puntos de la vía férrea, entre Cusco (km.0) – Machu Picchu pueblo (km.110) e Hidroeléctrica (km.122).
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