Lima, jul. 19 (ANDINA). Una fuerza multinacional de 1,500 soldados de 10 países realizaron entre fuego de metralla y explosiones un espectacular desembarco anfibio en la bahía de Ancón apoyados por marines estadounidenses, que “recuperaron el control” de un hipotético país sumido en el caos y el desgobierno a causa de un golpe de Estado.
Las fuerzas combinadas de paz de Perú, Colombia, Ecuador, Paraguay, Uruguay, Argentina, México, Brasil, Canadá y Estados Unidos, necesitaron apenas 20 minutos para desembarcar en la bahía en medio de las humo y las explosiones que retumbaron en la bahía.
Vehículos anfibios de Estados Unidos y Perú, el BAP “Callao”, el barco de la marina estadounidense “New Orleans y marinos de los diez países participaron en esta operación final del ejercicio multinacional “Sociedad de las Américas e Intercambio Sur” que por primera vez se realiza en el país.
Anteriormente estas jornadas de paz destinadas a mejorar habilidades e interoperabilidad entre la marina de Estados Unidos y las naciones latinoamericanas, se realizaron en Chile, Argentina y Brasil.
Con la presencia del ministro de Defensa, Rafael Rey y autoridades militares, el ejercicio se inició a las 10 de la mañana. Luego del desembarco, los marinos tomaron el control de la zona urbana con asaltos sincronizados de los grupos multinacionales que redujeron a los rebeldes.
Posteriormente fuerzas especiales de los 10 países iniciaron el ataque final para liberar a los rehenes no combatientes. Por medio de helicópteros que descendieron en la supuesta zona urbana, bajaron soldados aliados que en cuestión de minutos tomaron el control de la ciudad y liberaron a los rehenes.
Mas tarde esta misma fuerza de paz, formó anillos en el área urbana para auxiliar a los heridos y distribuir ayuda humanitaria a la población civil, sometida al hambre por un gobierno dictatorial.
Este tipo de entrenamiento multinacional tiene entre sus objetivos mantener la paz, operar en áreas de desastres y en establecer operaciones combinadas entre las distintas fuerzas militares. Este vez, en la cuarta edición de estos ejercicios, Perú participó con personal de la Marina de Guerra, del ejército y de la Fuerza Aérea.
El coronel Gary Johnston, comandante estadounidense, señaló que el despliegue de marinos de los países participantes mejoraban las relaciones militares, y también servían como entrenamiento para apoyar operaciones de contingencia en el mundo real como ayuda humanitaria, y operaciones de socorro en Sudamérica y en cualquier lugar del mundo.
Luego de los ejercicios anfibios, autoridades y militares se dirigieron al asentamiento humano Las Villas de Ancón, para participar en una actividad cívica en apoyo de los pobladores. Esta vez la fuerza multinacional, refaccionó, instaló luz eléctrica y pintó el colegio de la zona ante la algarabía de los alumnos y los padres de familia.
El ministro de Defensa Rafael Rey dijo que los ejercicios habían servido para mostrar la eficacia de las fuerzas militares. Agradeció las muestras de solidaridad y de trabajo que tuvieron los militares en el desarrollo de la actividad cívica a favor de los pobladores de Ancón.
El vehículo anfibio norteamericano que participó en el ejercicio tiene capacidad para transportar a 21 marinos equipados, tiene un cañón, ametralladora y un lanzagranadas. El anfibio peruano de fabricación española tiene capacidad para transportar a 12 militares equipados, posee una ametralladora y una autonomía de 800 kilómetros en tierra.
Los botes de goma peruanos de fabricación francesa, los MK-5, pueden transportar 10 infantes de marina equipados.
Los ejercicios navales se iniciaron el pasado 2 de julio y concluirán este 24 de julio. Los entrenamientos se realizaron en la Base de la Fuerza de Infantería de la Marina en Ancón.
También ase realizaron en la bahía Salinas en Huacho y en Quebrada Vicente. El entrenamiento incluyó tácticas ofensivas, entrenamiento diurno y nocturno entre otros.
A pesa de los idiomas, español, inglés y portugués, los comandos se comprendieron y actuaron coordinadamente durante los ejercicios.
Fuente de información: Andina
Imágen referencial
Las fuerzas combinadas de paz de Perú, Colombia, Ecuador, Paraguay, Uruguay, Argentina, México, Brasil, Canadá y Estados Unidos, necesitaron apenas 20 minutos para desembarcar en la bahía en medio de las humo y las explosiones que retumbaron en la bahía.
Vehículos anfibios de Estados Unidos y Perú, el BAP “Callao”, el barco de la marina estadounidense “New Orleans y marinos de los diez países participaron en esta operación final del ejercicio multinacional “Sociedad de las Américas e Intercambio Sur” que por primera vez se realiza en el país.
Anteriormente estas jornadas de paz destinadas a mejorar habilidades e interoperabilidad entre la marina de Estados Unidos y las naciones latinoamericanas, se realizaron en Chile, Argentina y Brasil.
Con la presencia del ministro de Defensa, Rafael Rey y autoridades militares, el ejercicio se inició a las 10 de la mañana. Luego del desembarco, los marinos tomaron el control de la zona urbana con asaltos sincronizados de los grupos multinacionales que redujeron a los rebeldes.
Posteriormente fuerzas especiales de los 10 países iniciaron el ataque final para liberar a los rehenes no combatientes. Por medio de helicópteros que descendieron en la supuesta zona urbana, bajaron soldados aliados que en cuestión de minutos tomaron el control de la ciudad y liberaron a los rehenes.
Mas tarde esta misma fuerza de paz, formó anillos en el área urbana para auxiliar a los heridos y distribuir ayuda humanitaria a la población civil, sometida al hambre por un gobierno dictatorial.
Este tipo de entrenamiento multinacional tiene entre sus objetivos mantener la paz, operar en áreas de desastres y en establecer operaciones combinadas entre las distintas fuerzas militares. Este vez, en la cuarta edición de estos ejercicios, Perú participó con personal de la Marina de Guerra, del ejército y de la Fuerza Aérea.
El coronel Gary Johnston, comandante estadounidense, señaló que el despliegue de marinos de los países participantes mejoraban las relaciones militares, y también servían como entrenamiento para apoyar operaciones de contingencia en el mundo real como ayuda humanitaria, y operaciones de socorro en Sudamérica y en cualquier lugar del mundo.
Luego de los ejercicios anfibios, autoridades y militares se dirigieron al asentamiento humano Las Villas de Ancón, para participar en una actividad cívica en apoyo de los pobladores. Esta vez la fuerza multinacional, refaccionó, instaló luz eléctrica y pintó el colegio de la zona ante la algarabía de los alumnos y los padres de familia.
El ministro de Defensa Rafael Rey dijo que los ejercicios habían servido para mostrar la eficacia de las fuerzas militares. Agradeció las muestras de solidaridad y de trabajo que tuvieron los militares en el desarrollo de la actividad cívica a favor de los pobladores de Ancón.
El vehículo anfibio norteamericano que participó en el ejercicio tiene capacidad para transportar a 21 marinos equipados, tiene un cañón, ametralladora y un lanzagranadas. El anfibio peruano de fabricación española tiene capacidad para transportar a 12 militares equipados, posee una ametralladora y una autonomía de 800 kilómetros en tierra.
Los botes de goma peruanos de fabricación francesa, los MK-5, pueden transportar 10 infantes de marina equipados.
Los ejercicios navales se iniciaron el pasado 2 de julio y concluirán este 24 de julio. Los entrenamientos se realizaron en la Base de la Fuerza de Infantería de la Marina en Ancón.
También ase realizaron en la bahía Salinas en Huacho y en Quebrada Vicente. El entrenamiento incluyó tácticas ofensivas, entrenamiento diurno y nocturno entre otros.
A pesa de los idiomas, español, inglés y portugués, los comandos se comprendieron y actuaron coordinadamente durante los ejercicios.
Fuente de información: Andina
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