Lima, ago. 25 (ANDINA). Perú mejoró 13 posiciones en el ranking mundial de calidad de infraestructura del Indice Global de Competitividad, del World Economic Forum (WEF), al pasar del puesto 110 al puesto 97 en el período 2009 - 2010, informó el hoy el Organismo Supervisor de la Inversión en Infraestructura de Transporte de Uso Público (Ositran).
De acuerdo al estudio del WEF, en el índice general que mide el cumplimiento de 12 indicadores agrupados en indicadores de requerimientos básicos, fortalecedores de la eficiencia y factores de innovación, Perú pasó del puesto 83 al puesto 78, de un total de 134 países.
En los indicadores de requerimientos básicos se mide la calidad del país en cuanto a instituciones, infraestructura, estabilidad macroeconómica, salud y educación primaria.
Mientras que en los indicadores fortalecedores de la eficiencia se mide educación superior y entrenamiento, eficiencia de mercado de bienes, eficiencia de mercado laboral, sofistificación del mercado financiero, preparación tecnológica y tamaño de mercado.
Asimismo, se consideran como factores de innovación a la sofistificación empresarial y la innovación.
Al respecto, el presidente del Ositran, Juan Carlos Zevallos, informó que en el mencionado ranking Chile ocupa el puesto 23, Uruguay el 61, México el 71, Argentina el 94 y Venezuela el 103.
“Si analizamos las infraestructuras que están bajo el ámbito de supervisión del Ositran, estamos comparativamente mejor en aeropuertos y vías férreas, ocupando en ambos el puesto 87, mientras que en carreteras ocupamos el puesto 93 y en puertos el 126”, detalló.
Esta situación revela que aún hay mucho por hacer en dichos sectores, manifestó luego de participar en el foro “Concesiones Viales y Asociaciones Público Privadas”, organizado por la Asociación de Caminos del Perú.
En ese sentido, anotó que la brecha de inversión en infraestructura asciende a 13,961 millones de dólares, de los cuales 571 millones corresponden a aeropuertos, 3,600 millones a puertos, al menos 2,415 millones a ferrocarriles y 7,375 millones a carreteras. Señaló que para disminuir esta brecha es importante la contribución del sector privado en conjunto con el Estado, ya que una insuficiente infraestructura eleva los costos logísticos y genera menor competitividad
Fuente de información: Andina
De acuerdo al estudio del WEF, en el índice general que mide el cumplimiento de 12 indicadores agrupados en indicadores de requerimientos básicos, fortalecedores de la eficiencia y factores de innovación, Perú pasó del puesto 83 al puesto 78, de un total de 134 países.
En los indicadores de requerimientos básicos se mide la calidad del país en cuanto a instituciones, infraestructura, estabilidad macroeconómica, salud y educación primaria.
Mientras que en los indicadores fortalecedores de la eficiencia se mide educación superior y entrenamiento, eficiencia de mercado de bienes, eficiencia de mercado laboral, sofistificación del mercado financiero, preparación tecnológica y tamaño de mercado.
Asimismo, se consideran como factores de innovación a la sofistificación empresarial y la innovación.
Al respecto, el presidente del Ositran, Juan Carlos Zevallos, informó que en el mencionado ranking Chile ocupa el puesto 23, Uruguay el 61, México el 71, Argentina el 94 y Venezuela el 103.
“Si analizamos las infraestructuras que están bajo el ámbito de supervisión del Ositran, estamos comparativamente mejor en aeropuertos y vías férreas, ocupando en ambos el puesto 87, mientras que en carreteras ocupamos el puesto 93 y en puertos el 126”, detalló.
Esta situación revela que aún hay mucho por hacer en dichos sectores, manifestó luego de participar en el foro “Concesiones Viales y Asociaciones Público Privadas”, organizado por la Asociación de Caminos del Perú.
En ese sentido, anotó que la brecha de inversión en infraestructura asciende a 13,961 millones de dólares, de los cuales 571 millones corresponden a aeropuertos, 3,600 millones a puertos, al menos 2,415 millones a ferrocarriles y 7,375 millones a carreteras. Señaló que para disminuir esta brecha es importante la contribución del sector privado en conjunto con el Estado, ya que una insuficiente infraestructura eleva los costos logísticos y genera menor competitividad
Fuente de información: Andina
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