Lima, jun. 25 (ANDINA). La festividad de San Sebastián, celebrabrada el 20 de enero en el distrito del mismo nombre, en Cusco, fue declarada Patrimonio Cultural de la Nación por el Instituto Nacional de Cultura (INC), mediante una resolución publicada hoy en el boletín de Normas Legales del Diario Oficial El Peruano.
El título se sustenta en su importancia local y regional, trascendencia histórica, riqueza de contenidos y de elementos asociados que contribuyen a la afirmación de la identidad colectiva a nivel nacional.
Agrega que la festividad de San Sebastián es uno de los cultos cusqueños con mayor proyección en el departamento. La acompañan diversas manifestaciones de tradición oral, imaginería, elementos de música, danza y representación, gastronomía, además de ser vehículo de lazos sociales y relaciones comerciales.
La resolución señala que la historia de San Sebastián es una de las más extremas e invocadas en la imaginería cristiana: la del noble romano que es torturado por su fe durante las persecuciones del siglo III, fe que no abandonó pese a múltiples torturas y un intento de ejecución.
Esta imagen característica de martirio, muestra de una devoción extrema e inquebrantable, ha sido una de las más reproducidas en la hagiografía cristiana (historia de las vidas de los santos) durante el renacimiento y barroco.
Una imagen de San Sebastián, que en cierta versión es una pintura y en otra un busto pequeño, fue llevada a Cusco a pocos años de la llegada de los españoles. Se convirtió en el patrón de los indios.
El principal milagro que se le atribuye a la imagen del santo se relaciona a una prolongada peste de viruela (1580-1592) que afectó al departamento, con excepción de lo que actualmente es el distrito de San Sebastián, lo que se atribuyó a la protección dada por el patrón local.
La imagen fue llevada a la catedral de la Ciudad Imperial y el cabildo eclesiástico establece su fiesta el 20 de enero, dándosele el título de Patrón Jurado de Cusco.
La mejor prueba de fe por la imagen ocurrió en 1922, cuando una helada asoló el departamento y acabó con las cosechas que permitían la donación de insumos para la fiesta de San Sebastián. Como respuesta, tales recursos vinieron de donantes provenientes del Valle Sagrado de los Incas y el Altiplano puneño que a partir de entonces tienen precencia permanente en la organización del culto.
Por otro lado, el INC declaró patrimonio cultural a la zona arqueológica monumental Santa Rita, ubicada en la provincia de Virú (La Libertad); y a los sitios arqueológicos de Punkuri Alto, en la provincia de Santa (Áncash); y Campanayuq Rumi, ubicado en la provincia de Vilcas Huamán (Ayacucho).
Cualquier proyecto de obra nueva, caminos, carreteras, canales, denuncios mineros o agropecuarios, obras habitacionales y otro que pudiese afectar o alterar el paisaje de los referidos monumentos arqueológicos, deberá contar con la aprobación del INC.
Fuente de información: Andina
El título se sustenta en su importancia local y regional, trascendencia histórica, riqueza de contenidos y de elementos asociados que contribuyen a la afirmación de la identidad colectiva a nivel nacional.
Agrega que la festividad de San Sebastián es uno de los cultos cusqueños con mayor proyección en el departamento. La acompañan diversas manifestaciones de tradición oral, imaginería, elementos de música, danza y representación, gastronomía, además de ser vehículo de lazos sociales y relaciones comerciales.
La resolución señala que la historia de San Sebastián es una de las más extremas e invocadas en la imaginería cristiana: la del noble romano que es torturado por su fe durante las persecuciones del siglo III, fe que no abandonó pese a múltiples torturas y un intento de ejecución.
Esta imagen característica de martirio, muestra de una devoción extrema e inquebrantable, ha sido una de las más reproducidas en la hagiografía cristiana (historia de las vidas de los santos) durante el renacimiento y barroco.
Una imagen de San Sebastián, que en cierta versión es una pintura y en otra un busto pequeño, fue llevada a Cusco a pocos años de la llegada de los españoles. Se convirtió en el patrón de los indios.
El principal milagro que se le atribuye a la imagen del santo se relaciona a una prolongada peste de viruela (1580-1592) que afectó al departamento, con excepción de lo que actualmente es el distrito de San Sebastián, lo que se atribuyó a la protección dada por el patrón local.
La imagen fue llevada a la catedral de la Ciudad Imperial y el cabildo eclesiástico establece su fiesta el 20 de enero, dándosele el título de Patrón Jurado de Cusco.
La mejor prueba de fe por la imagen ocurrió en 1922, cuando una helada asoló el departamento y acabó con las cosechas que permitían la donación de insumos para la fiesta de San Sebastián. Como respuesta, tales recursos vinieron de donantes provenientes del Valle Sagrado de los Incas y el Altiplano puneño que a partir de entonces tienen precencia permanente en la organización del culto.
Por otro lado, el INC declaró patrimonio cultural a la zona arqueológica monumental Santa Rita, ubicada en la provincia de Virú (La Libertad); y a los sitios arqueológicos de Punkuri Alto, en la provincia de Santa (Áncash); y Campanayuq Rumi, ubicado en la provincia de Vilcas Huamán (Ayacucho).
Cualquier proyecto de obra nueva, caminos, carreteras, canales, denuncios mineros o agropecuarios, obras habitacionales y otro que pudiese afectar o alterar el paisaje de los referidos monumentos arqueológicos, deberá contar con la aprobación del INC.
Fuente de información: Andina
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