DE AREQUIPA A CHIVAY: UN VARIOPINTO RECORRIDO DE 3 HORAS
Todos empiezan por la capital, menos nosotros. A pesar de que el punto de partida de cualquier recorrido turístico en Arequipa siempre es la Ciudad Blanca, hemos decidido dejarla para otro momento. Descendemos del avión, nos trepamos a un bus y vamos a Chivay.
Ubicada a 160 km de la ciudad de Arequipa, esta es la capital de Caylloma, una de las 8 provincias que conforman el departamento de Arequipa. Allí comenzamos la travesía por el Valle del Colca que nos llevará finalmente al célebre Mirador de la Cruz del Cóndor, donde se puede apreciar el vuelo de esta enigmática ave. Un poco antes, pasada la primera hora de un viaje de 3 horas y media en bus, simpáticos ejemplares de vicuñas y alpacas nos observan y parecen darnos la bienvenida a la Reserva de Salinas y Aguada Blanca.
Son pocas, pero son. En las casi 367 mil hectáreas que conforman la reserva entera solo nos es posible ver una veintena de vicuñas. Bastan unos minutos de observación para notar el territorial comportamiento de estos auquénidos: un grupo de 9 vicuñas, liderado por un macho y 8 hembras, pugna por entrar al flanco dominado por un grupo similar a ellas. Las colas en alto de ambos machos nos advierten de una pelea frontal en breves minutos. Se observan, se analizan y dan algunos pasos en círculos. La afortunada colocación de una red que los separa ha impedido la confrontación y el grupo retante se retira al lado izquierdo de la carretera. Hemos sido dichosos testigos de una práctica no muchas veces vista.
Continuamos nuestro recorrido y nos advierten de no comer demasiado, pues antes de llegar a Chivay debemos pasar por una altura de 4910 msnm, un lugar conocido como el Mirador de Los Volcanes. “Ven ahí arriba. Por ahí pasaremos”, nos dice Helmut Huanqui, unos de los guías que nos acompaña, señalando la parte más alta de una montaña ataviada de espesas nubes.
CHIVAY Y SUS BAÑOS TERMALES
Luego de 3 horas y media de viaje en el bus, finalmente llegamos a la Plaza de Armas de Chivay. El monumento de un cóndor con sus alas desplegadas nos da la bienvenida a la ciudad y nos hace saber que ya nos encontramos en el Valle del Colca. Luego de almorzar y recorrer rápidamente la plaza y el mercado contiguo partimos hacia Yanque, distrito aledaño donde pasaremos la noche.
El lugar elegido ha sido el Colca Lodge, un paradisíaco hotel/ spa estratégicamente situado frente al río, rodeado por todos sus lados de una frondosa vegetación. La energía del lugar se siente apenas llegas y más aún cuando se disfruta de uno de los principales atractivos de la zona y también de este hotel: los baños termales.
Estos se ubican al pie del río en un ambiente natural con muy poca intervención humana. Cada una de las tres pozas termales posee una temperatura diferente que oscila entre los 36 y 39 grados centígrados. Sumergidos en estas pozas, los 5°C del exterior son imperceptibles.
EL GRAN ESPECTACULO: EL VUELO DEL CONDOR
Para ver este hermoso espectáculo partimos muy temprano del Colca Lodge con dirección hacia el Cañón del Colca. Antes de llegar a este lugar se puede parar en varias zonas y miradores que dan una asombrosa vista de las andenerías que visten todo el valle. Son imperdibles en este recorrido de 1 hora y media las tumbas colgantes (agujeros ubicados en lo alto de las montañas donde alguna vez descansaran los restos de los antiguos pobladores de la zona: los collaguas) y las apachetas (colocación de piedras del lugar en forma de torre que turistas y lugareños ponen para pedir un deseo en esta zona sagrada). Poco antes de llegar al Mirador de la Cruz del Cóndor pasamos por un túnel de 350 metros de largo donde se dice habita el Chinchilico o demonio. Nada importa con tal de llegar al espectáculo principal.
Una cruz ubicada en lo alto de este mirador nos indica que hemos llegado. Eso y la gran cantidad de turistas que, cargados de cámaras fotográficas y de videos, se posicionan alrededor del mirador. El cielo está aún nublado y es necesario esperar a que este se despeje para que los cóndores inicien su vuelo. A la media hora el primer rayo intenso de sol se ve y se siente en el lugar y con ella el primer cóndor se puede divisar a lo lejos. Minutos más tarde un ejemplar más se le une y ambos parecen posar para nuestras cámaras en su incesante vuelo a lo largo del cañón. Grandes signos de admiración y asombro se pueden notar entre los presentes, quienes nos dejamos encantar por esta maravillosa exhibición.
LA BLANCA CIUDAD DE AREQUIPA: ASOMBROSA ARQUITECTURA Y GASTRONOMIA
No podíamos terminar este viaje sin visitar su capital. Para el tercer día de nuestra travesía un recorrido por sus miradores más importantes como el de Yanahuara y el de Carmen Alto son imprescindibles. Este último proporciona al visitante una vista espectacular de la zona y retrata de manera perfecta su bucólico paisaje. Los tres volcanes principales (El Chachani, El Misti y El Pichu Pichu) se erigen imponentes ante el Valle de Chilina bañado por el río de la ciudad: el Chili.
Regresamos al centro de la ciudad para visitar sus principales puntos atractivos: El monasterio de Santa Catalina y la Iglesia de la Compañía. El primero, una construcción que data del siglo XVI, donde se albergaban a las hijas de las familias más distinguidas de la ciudad con vocación religiosa, abre sus puertas a los visitantes y nos sumerge en la historia de sus antiguos claustros por una hora. La visita puede hacerse también de noche, con la cual la atmósfera es también distinta. Resaltan del lugar su gran colección de cuadros y muebles de la época, así como la pequeña tienda que vende los productos que actualmente las monjas realizan.
Por su lado la iglesia de la Compañía, ubicada en una de las esquinas de la Plaza de Armas, que data también del siglo XVI, ofrece a sus feligreses y visitantes una gran cantidad de lienzos de la escuela cusqueña. La construcción que vemos en la actualidad data de 1650 y fue reconstruida tras el terremoto de 1584.
Y ningún viaje a Arequipa está completo si no se prueba su exquisita comida, considerada como una de las mejores del país. Para deleitarnos con su gastronomía tradicional, visitamos la picantería de Doña Lucila, quien es una leyenda en la ciudad. Con sus 94 años de edad aún supervisa la cocina de este restaurante que ahora es llevado por dos de sus hijas, quienes heredaron su sazón. Pruebe el crocantísimo cuy chactado que es su plato estrella o el americano, un gran plato de arroz con pato, chancho, pastel de papa y rocoto relleno si es que no se decide entre la amplia variedad de potajes.
Fueron 3 días de viaje por los parajes más representativos de Arequipa y lo más seguro es que muchas experiencias maravillosas se hayan quedado en el tintero. Si tú deseas vivir las tuyas, puedes aprovechar los paquetes especiales que PromPerú pone a disposición, gracias a su campaña “El sur pone”. Visita www.turismoperu.info/surpone y encuentra el paquete que más se acomode a tu bolsillo. Recuerda que solo tienes hasta el 31 de marzo para aprovecharlos.
Fuente de información: El Comercio
Por Zaida Ysla
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